Francia alberga una serie de localidades que deslumbran por su belleza. Todo lo que tenés que saber antes de viajar al Viejo Continente.
Francia, conocida por su exquisita gastronomía, su rica historia y su encanto romántico, alberga una serie de pueblos pintorescos que parecen sacados de un cuento de hadas. Entre las numerosas joyas escondidas que adornan el país, destacan tres pueblos que deslumbran por su belleza y autenticidad.
Y en Millas x el Mundo te contamos cuáles son y todo lo que tenés que saber sobre ellos.
Eze
Ubicado en la Riviera Francesa, Eze emerge majestuosamente en lo alto de un acantilado, ofreciendo vistas espectaculares del Mediterráneo. Con sus estrechas calles empedradas, casas de piedra cubiertas de enredaderas y encantadoras plazas llenas de flores, este pueblo medieval cautiva a turistas de todo el mundo. Además, su famoso Jardín Exótico, que alberga una impresionante colección de plantas suculentas y cactus, añade un toque de exotismo a su encanto.
Colmar
Situado en la región de Alsacia, Colmar parece de otro mundo. Conocido como la “Pequeña Venecia” de Francia, este pueblo con coloridas casas de entramado de madera y sus canales flanqueados por flores, se distingue por sus pintorescos puentes y su ambiente romántico. Los visitantes pueden perderse en su laberinto de calles adoquinadas, descubriendo encantadoras tiendas de artesanía y degustando los deliciosos vinos de la región.
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Annecy
Situado en los Alpes franceses, a orillas del lago homónimo, Annecy es una joya que deslumbra por su belleza natural y su encanto histórico. Conocida como la “Venecia de los Alpes”, esta ciudad se distingue por su casco antiguo medieval, con coloridas casas frente al agua y puentes floridos que cruzan los canales. Además, el castillo de Annecy, que se alza majestuosamente sobre la ciudad, añade un toque de misterio y grandeza a este destino encantador.