Una reconocida ciudad balnearia de Brasil tomó una decisión sumamente contundente para atraer turistas en esta etapa de mejoras epidemiológicas.
La playa central de Camboriú, en Santa Catarina, ampliará su franja de arena en hasta 70 metros, triplicando la superficie actual. Se trata de una inversión que representará un desembolso de u$s13 millones, informó el Instituto Brasileño de Turismo (Embratur).
Se pretende que a finales de octubre, antes del inicio de la temporada de verano en América del Sur, la franja de arena haya aumentado de 25 a 70 metros de ancho.
Los avances de las tareas están siendo monitoreadas por 13 cámaras, que transmiten imágenes de la obra en tiempo real y de manera virtual.
El gobierno de esta localidad, con poco más de 80.000 habitantes, estipuló que las obras del relleno buscan reducir los problemas provocados por el avance del nivel del mar, que en el pasado ya inundó la Avenida Atlântica, su principal vía costera.
Para muchos turistas, Camboriú fue llamada como “la Dubai brasileña”, debido a su fisonomía de rascacielos construidos sobre la línea de playa.
En la playa Central se construye en la actualidad el Yachthouse, que será el futuro edificio más alto de Brasil, con 275 metros de altura.
El ejemplo de otras localidades de Brasil
Muchos habitantes y turistas advierten que las construcciones en el borde del mar provocan que después de mediodía, se genere una sombra que tapa el sol a los bañistas que acuden a disfrutar de la playa. Suceden situaciones parecidas en Boa Viagem, en Recife, y Vila Velha, en Espírito Santo.
Para superar la franja de arena y garantizar la llegada de los rayos del sol durante todo el día, un dragado similar ya se hizo en las playas de Copacabana (Río de Janeiro), en la década de 1970, y en Canasvieiras (Florianópolis), que amplió su franja de arena en 50 metros el año pasado.
Mejoras en Camboriú
A partir de noviembre, se podrá conocer una de las nuevas atracciones inauguradas en pandemia: BC Big Wheel, una rueda de 65 metros de altura, y la segunda más alta de Brasil, después de la Rio Star de Río de Janeiro.
Ubicada en la Barra Norte, al extremo de la Playa Central, la atracción cuenta con 32 cabinas climatizadas que permiten un paseo desde lo alto con tanto de la ciudad como de la costa de Santa Catarina.
Foto destacada: El Observador.