Fundado en 1900 y con apenas 1500 habitantes, Saldungaray compite en los Best Tourism Villages para convertirse en el más lindo del mundo.
Lejos del bullicio de la ciudad, la provincia de Buenos Aires esconde tesoros ocultos donde el tiempo parece detenerse. Se trata de pequeños poblados con historias fascinantes, arquitectura colonial y paisajes pintorescos que invitan a explorar sus calles empedradas y plazas arboladas. Saldungaray es uno de estos pueblos y en esta oportunidad compite por convertirse en el más lindo del mundo.
Sucede que al igual que todos los años, desde la Organización de las Naciones Unidas para el Turismo (ONU) promovieron la competencia de los pueblos más lindos del mundo, llamada Best Tourism Villages, con el fin de destacar aquellas pequeñas urbanizaciones rurales; y Saldungaray volvió a candidatearse junto a otras siete localidades nacionales con el objetivo de obtener el título tan preciado.
Una joya oculta en la provincia
Esta localidad poco conocida y con apenas 1500 habitantes forma parte de la comarca turística que compone el sistema de Sierra de la Ventana. Fundado en el año 1900 por el inmigrante vasco-francés Pedro Saldungaray, su historia comenzó mucho antes de su fundación, cuando solamente era un paraje en el que estaba ubicado el Fortín Pavón.
Con el paso de los años Saldungaray fue creciendo y uno de los momentos clave de su historia ocurrió en 1903 con la llegada del Ferrocarril. Desde entonces, el pueblo se desarrolló económicamente.
Sin embargo, en el 2016 el gobierno provincial cerró la empresa Ferrobaires y se suspendieron todos los servicios a esta zona.
Qué hacer en Saldungaray
Una de las principales atracciones de este pueblo es la plaza principal, llamada Plaza Independencia. Desde allí se puede observar a la iglesia Nuestra Señora del Tránsito, famosa por contar con una imagen de la Virgen María en posición de reposo que es única a nivel mundial que fue traída a nuestro país desde Francia directamente por Pedro Saldungaray, el fundador del pueblo.
Un lindo paseo también puede ser recorrer el cauce del río Sauce Grande hasta encontrarse con un portal majestuoso que fue construido por el arquitecto Francisco Salomone y oficia como puerta de entrada al cementerio local.
Para finalizar, la visita al Fortín Pavón es una atracción en sí misma. Ubicado a un kilómetro del pueblo, el lugar alberga una parte importante de la historia argentina y es muy frecuentado por los turistas que se acercan a la zona.
Además, la localidad cuenta con la bodega del mismo nombre que el pueblo que desarrolla diferentes propuestas de vinos como Sauvignon Blanc, Chardonnay, Merlot y Malbec.
Cómo llegar a Saldungaray
Saldungaray está ubicado a 576 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires y se demora unas siete horas en auto hasta llegar. Por otro lado, quienes visiten el poblado desde Sierra de la Ventana tardarán aproximadamente 11 minutos.