Este joven estudiante no pudo regresar a su hogar por la pandemia, y tomó una decisión tan fuerte que su historia se viralizó en redes sociales.
Su nombre es Kleon Papadimitriou, y quedó atrapado en Escocia por no conseguir ningún vuelo hacia Grecia.
Sin embargo, eso no lo frenó para volver a su casa, y decidió que si no lo hace por aire, lo haría por tierra. Pero de ninguna manera recurrió al transporte público, además de que las distancias son gigantescas.
Por eso, en un simple desafío y puesta a prueba, agarró su bicicleta y recorrió los 4.100 kilómetros que lo separaban de Atenas.
“Empezó como una broma porque me gustan las aventuras. Pero luego comencé a estudiarlo para ver si era realmente posible y cuando descubrí que no podía volar a casa decidí ir en bicicleta”, dijo el estudiante de Ingeniería de la Universidad de Aberdeen.
Tras recorrer la costa británica se dirigió en barco hacia Holanda. Desde allí pedaleó hasta Alemania, y muchas familias le ofrecieron alojamiento.
La aventura duró 48 días, superó los 100 kilómetros diarios, y la base de su supervivencia fueron las sardinas enlatadas y la tienda de campaña.
No cabe duda que a este muchacho, el coronavirus no le impidió volver a su hogar.