Ubicado en el corazón de la Toscana, Certaldo es un tesoro medieval que deslumbra con su arquitectura histórica, paisajes pintorescos y rica herencia cultural.
Enclavado en las colinas de la región de la Toscana, Certaldo es un pueblo medieval que parece salido de un cuento de hadas. Situado a medio camino entre Florencia y Siena, este rincón de Italia ofrece una experiencia única que combina historia, cultura y belleza natural.
El casco antiguo de Certaldo, conocido como Certaldo Alto, es el principal atractivo del pueblo. Accesible a través de un funicular que conecta la parte baja de la ciudad con la colina, Certaldo Alto está repleto de calles adoquinadas, edificios de ladrillo rojo y vistas panorámicas impresionantes. Uno de los puntos más destacados es el Palazzo Pretorio, una fortaleza del siglo XII que alberga frescos y exposiciones de arte.
Casa de Giovanni Boccaccio
Certaldo es también la cuna del famoso escritor Giovanni Boccaccio, autor del Decamerón. Su casa natal, ahora un museo, ofrece una mirada fascinante a la vida y obra del célebre humanista. Los visitantes pueden explorar las habitaciones históricas y admirar una colección de manuscritos y objetos personales de Boccaccio.
Iglesia de San Jacopo e Filippo
Otro sitio imperdible es la iglesia de San Jacopo e Filippo, que data del siglo XIII. Este edificio religioso es un ejemplo notable de la arquitectura medieval y alberga la tumba de Boccaccio.
Festivales y tradiciones
Certaldo es famoso por su vibrante vida cultural y sus festivales. El Mercantia, un festival de teatro callejero que se celebra cada julio, transforma el pueblo en un escenario mágico donde artistas de todo el mundo presentan espectáculos de música, danza y artes escénicas. Este evento, junto con otros festivales locales, refleja el espíritu festivo y la rica tradición cultural de Certaldo.
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Gastronomía Toscana
La gastronomía es otro de los grandes atractivos de Certaldo. Los restaurantes locales ofrecen una deliciosa selección de platos toscanos, como la pappardelle al cinghiale (pasta con jabalí) y la ribollita (una sopa de verduras y pan). Además, la zona es conocida por su producción de vino Chianti, que complementa perfectamente cualquier comida.